La guerrilla antifranquista en la Siberia Extremeña y la Jara Toledana (1939-1950)
Benito Díaz y José Ignacio Fernández nos adentran en la guerrilla antifranquista en la Siberia extremeña y la Jara Toledana a través de “Mujeres y hombres de la sierra. La guerrilla antifranquista en la Siberia extremeña y la Jara toledana (1936-1950)”. El libro recoge, entre otros temas, el importante papel de la mujer al lado de los guerrilleros en la sierra y las dificultades particulares que éstas tuvieron que afrontar, dada su condición, frente a los hombres; la mayoría de las veces ocupadas de asuntos de intendencia, tareas de enlace y, raramente, protagonistas de acciones guerrilleras. De los casi 6.000 guerrilleros que hubo en España, apenas cien fueron mujeres, y de ese número, un gran porcentaje se concentró en las sierras extremeñas, en Ciudad Real y en Toledo.
- ISBN: 9788493648664
- Editorial: Colectivo de Investigación Histórica Arrabal
- Fecha de la edición: 2017
- Lugar de la edición: Toledo. España
- Colección: Monografías
- Encuadernación: Rústica
- Medidas: 24 cm
- Nº Pág.: 357
- Idiomas: Español
Benito es Doctor en Historia del Mundo Contemporáneo por la Universidad Complutense de Madrid y
profesor de la UNED en Talavera de la Reina. Desde hace más de veinte años compagina los estudios sobre la historia
contemporánea española con el estudio del “maquis”, de la guerrilla antifranquista en el centro peninsular. Su primer trabajo
sobre “La Guerrilla antifranquista en Toledo” fue pionero en el conocimiento de unas gentes y unos espacios de lucha que había
pasado desapercibidos para la mayoría de los historiadores, centrados en los episodios del Norte. Su último trabajo, “La Sierra
contra Franco”, es un tributo a la Memoria, con más de 500 entrevistas. En la obra se narra las vivencias de dos guerrilleros,
Joaquín Ventas -Chaqueta Larga- y José Méndez -el Manco de Agudo- con vidas y finales muy diferentes. El primero antifascista
convencido, lucho y consiguió huir a Francia, el segundo se hizo guerrillero por presión, y murió en la sierra a los nueve años de
echarse al monte.